El cuento de la criada - Margaret Atwood

FICHA TÉCNICA

Nombre: El cuento de la criada

Autora: Margaret Atwood

País: Canadá 

Fecha de publicación: 1985

"Mi persona es una cosa que debo componer, como se compone una frase. Debo presentar algo que ha sido hecho, no que ha nacido".

...

Defred nos lleva a ese lugar distópico en la Republica de Gilead en el que las mujeres han sido despojadas de sus derechos y de acuerdo a las nuevas leyes sólo sirven para procrear. Se ha establecido una clasificación; están aquellas que por su edad o condición no tendrán hijos y por lo tanto se dedican a la cocina, aquella que sí pueden tener y las obligan a tener relaciones sexuales con sus Comandantes hasta que conciban, aquellas que ya tienen hijos, aquellas que son esposas de los Comandantes y que cuidan de los niños, y aquellas que acompañan a los comandantes a sus reuniones.

Puede parecer que eso es todo pero no lo es. Para empezar, Defred no es su verdadero nombre. Literalmente significa De Fred (Propiedad de Fred). También, a través de analepsis podemos entender cómo era su vida antes de que sucediera todo esto. Vemos que ella y todas sus compañeras tenían una vida tranquila y satisfactoria. Incluso, tenía una familia (habla de su hija y su esposo), tenía trabajo, dinero propio, una casa, libros. Pareciera que esos recuerdos son borrosos porque no sabe cuánto tiempo ha transcurrido desde entonces, sólo sabe que un día simplemente pasó y  ahora todo eso está prohibido. 

Es una novela distópica maravillosa que no debe dejarse pasar con desdén. Determinar si es o no feminista es algo que no tiene relevancia. Lo importante es conocer la trama y la historia de esas mujeres que en la vida real siguen viviendo las mismas circunstancias (con ligeros cambios). Porque yo sé que esto no se ha acabado. Y a pesar de todo lo que muchas mujeres se han esforzado para reivindicar; el machismo, el sexismo, y la misoginia siguen existiendo. Forman parte importante en el estilo de vida de otras mujeres que piensan que es habitual que sucedan esas cosas. Queda tanto por hacer.  

...

Fragmentos bellos:

"Suspirábamos por el futuro. ¿De donde sacábamos aquel talento para la insaciabilidad? Flotaba en el aire, y aun se respiraba, como una idea tardía".

"La toca blanca también es de uso obligatorio; su misión es impedir que veamos, así como que nos vean".

"Evito mirar mi cuerpo, no tanto porque sea algo vergonzoso o impúdico, sino porque no quiero verlo. No quiero mirar algo que me determina de forma tan absoluta".

"Todos los meses espero la sangre con temor, porque si aparece representa un fracaso. Otra vez he fracasado en el intento de satisfacer las expectativas de los demás, que han acabado por convertirse en las mías".